A la luz de los últimos acontecimientos ocurridos en el interior de Yahoo, con robos masivos de información que han dañado de gravedad su reputación, muchos se han preguntado si el hecho de que Verizon se hiciese con la otrora gran compañía de Internet tenía sentido. Cualquiera, al comprar un producto, si descubre que este ha sufrido problemas de tal calibre, se echaría para atrás.
En Bloomberg, conversaron al respecto de este tema con Susan Decker, que fue presidenta de Yahoo de 2007 a 2008, administrando las operaciones de la compañía mientras fue CEO Jerry Yang, uno de sus fundadores. Nadie mejor que alguien como ella para dar una perspectiva algo más precisa acerca de esta adquisición.
Decker comenzó la entrevista afirmando que la venta de Yahoo era inevitable en base a lo que había sido la empresa en los últimos tiempos. Esta afirmación tan categórica la sustentó en que su principal problema era que la administración, incluso cuando Jerry y ella estaban al frente, no tenía claro cuál era el principal factor distintivo de Yahoo respecto a su competencia, qué era aquello con lo que el consumidor distinguía a Yahoo del resto. Para ella, ya entonces todo giraba en torno al contenido. Pero el problema de identidad de la compañía estaba entonces presente y, según ella, continúa hasta hoy en día.
Entrando ya en la compra por parte de Verizon, Decker dijo que la veía muy lógica, pues se trata de una de buena oportunidad de consolidación en el mercado, algo que resulta patente al mirar las propiedades que tiene Verizon y las que tiene Yahoo. Para ella, resulta clara la lógica de negocios que hay tras la operación.
En cuanto a cómo puede afectar al precio final de venta las revelaciones de los hackeos que sufrió Yahoo, que no fueron precisamente menores, Decker no se atrevió a aventurar nada, aunque cree que es posible que en algún momento se produzca una renegociación de algún tipo, variando efectivamente dicho precio. Pero lo que no cree que vaya a ocurrir es que los hackeos vayan a ser algo que impida que la transacción se produzca. Eso sí, a su juicio los líderes de la compañía deben hacerse responsables de lo ocurrido pues, al fin y al cabo, sucedió mientras ellos estaban a cargo.
Y como no, si se habla de Yahoo en algún momento también hay que hablar de Marissa Mayer. Respecto a ella, Decker dijo que le había tocado una mano muy dura con al que jugar. Según ella, y sin duda en base a su experiencia, cuando te encuentras con una compañía que está operando de cierta manera, no es fácil cambiar esos comportamientos. Decker se plantea que, al igual que cualquier otra persona, seguramente Mayer ha de pensar que hay cosas que, mirando hacia atrás, hubiese hecho de forma diferente. Pero aun así, su opinión es que hizo lo que pudo pero que, lamentablemente, no fue lo suficiente como para sacar a flote la empresa y evitar su venta.
Imagen: 施典志(tenz1225)