Pocas cosas tan nefastas como comprar las piezas para un nuevo PC a través de Internet para luego descubrir, una vez que nos llega todo a casa, que la CPU que hemos pedido no es compatible con la placa base o mainboard. En ese momento, todos nuestros planes de contar con un nuevo equipo se nos vienen abajo y tenemos que iniciar el proceso de cambio de piezas que, según la tienda, puede que no sea ni sencillo ni rápido.
Para evitar que nos sucedan cosas de este tipo, debemos tener en cuenta que algunos componentes tienen características específicas que solo funcionan en conjunto con otras partes que cuentan con el soporte respectivo. El ejemplo más sencillo: una CPU Intel no se podrá instalar en ningún momento en un mainboard que venga con un zócalo o socket AMD.
El principal culpable de los problemas de compatibilidad suele ser el mainboard, ya que tiene que trabajar con varios componentes como la CPU, la RAM y muchos más. Al fin y al cabo, viene a ser algo así como el corazón de nuestro PC, lo cual es la razón de que debamos estar muy atentos a la hora de comprobar sus especificaciones y los requisitos que demanda.
Al construir una nueva máquina, lo mejor es comenzar con el mainboard y la CPU. Con ambos elementos, debemos asegurarnos de que los dos podrán trabajar juntos sin problemas. Para ello, aquí van algunas recomendaciones para garantizarnos de que sea así:
- Comprueba el socket de la CPU del mainboard y compáralo con el procesador elegido. O, dicho de otra forma, asegúrate de que el procesador elegido se corresponde con el socket del mainboard
- Averigua qué tipo de RAM soporta el mainboard (por ejemplo, DDR4 2300MHz)
- Compáralo con la RAM que puede soportar la CPU. Asegúrate entonces de que haya correspondencia
- Averigua si el mainboard es compatible o no con una configuración SLI de la GPU
- Comprueba el tamaño y las dimensiones ATX para compararlo con la caja en la que vas a construir el equipo
- Asegúrate de conseguir una fuente de alimentación que provea de la suficiente energía al mainboard elegido.
Recurre a herramientas especializadas
Otra cosa que puedes hacer es recurrir a un sitio web que te va a resultar muy útil a la hora de construir tu nuevo PC o incluso de actualizar el que tienes. Se llama PCPartPicker.
Se trata de una herramienta que nos permite ir seleccionando las diferentes partes de nuestro PC al tiempo que comprueba la compatibilidad entre las piezas y solo nos da las opciones adecuadas entre las que elegir. De esta manera, por ejemplo, partiendo con la elección de una CPU, el sistema elimina los sockets incompatibles del mainboard y la RAM y solo nos da las opciones que funcionarán entre sí. En el caso de que, de alguna manera, nos las arreglemos para juntar elementos que no funcionarán juntos, el sitio nos mostrará una alerta para que corrijas el problema.
Aunque podemos hacer la solicitud de las piezas desde el sitio, sobre todo nos resultará útil para elaborar una lista de las mismas y luego decidir si hacemos la compra allí o nos buscamos nosotros la forma de comprarlas en otros lugares. Dado que es posible guardar y compartir las listas que hagamos, esto nos será útil especialmente si no tenemos mucha experiencia en este tema y queremos que algún amigo que sepa más le eche un vistazo antes de gastar un centavo.