Angela Ahrendts no es un nombre que se vea con frecuencia en las noticias de tecnología. Su trabajo más bien es del tipo que se realiza fuera de los focos de los medios ya que es la vicepresidenta senior de tiendas minoristas y en línea de Apple. Sin embargo, ha sido la empleada mejor pagada de la compañía de Cupertino durante 2017.

Y sí, al decir esto incluimos en la lista de empleados al mismísimo Tim Cook, cabeza de la compañía. De hecho, Ahrendts ha ganado en 2017 casi el doble que él ya que se ha llevado a casa entre una cosa y otra nada menos que 24,2 millones de dólares, mientras que Cook ha ganado 12,8 millones.

Aunque el salario de Cook triplica el de Ahrendts (3 millones anuales frente a 1 millón), si la ejecutiva ha podido ganar más este año ha sido debido a dinero procedente de diferentes rubros: 20 millones en acciones, 3,1 millones en pagos por rendimiento y 88 mil dólares por otras compensaciones.

De hecho, según se puede apreciar en un documento de la compañía (PDF) presentado ante la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU., gracias a esos rubros, Ahrendts ha sido también la ejecutiva mejor pagada de los dos años anteriores, 2016 y 2015.

Respecto a esos rubros, Apple explicó en una declaración que «Nuestro programa de compensación para ejecutivos está diseñado para recompensar el rendimiento de una manera sencilla y eficaz. Refleja el tamaño, alcance y éxito sin parangón del negocio de Apple, así como la importancia de que nuestros ejecutivos funcionen como un equipo de alto rendimiento, al tiempo que se centran en medidas clave de rentabilidad y en la creación de valor para los accionistas. Creemos que la compensación pagada a nuestros directores ejecutivos designados para 2017 refleja y recompensa adecuadamente sus contribuciones a nuestro desempeño».

Ahrendts, de 57 años, lleva en Apple desde octubre de 2013, mes en el que asumió su cargo. Este hace que se encargue de supervisar la estrategia, los bienes raíces, el desarrollo y las operaciones de las tiendas físicas, la tienda online y los centros de contacto de la compañía.

Antes de irse a Cupertino, Ahrendts fue directora y CEO de la marca de moda de lujo Burberry y previamente fue vicepresidenta ejecutiva de Liz Claiborne Inc. y presidenta de Donna Karan International.

Como hemos dicho, su nombre es no es de los que aparezca en las noticias tecnológicas a las que estamos acostumbrados. Pero eso no es óbice que impida que se trate de una profesional de gran reputación, llegando a ser habitual de la lista anual de las 100 mujeres más poderosas del mundo elaborada por Forbes. En 2017, fue incluida en el puesto 13 de dicha lista.