A raíz del tiroteo que se produjo en Las Vegas el pasado 2 de octubre, en el que un hombre abrió fuego con armas automáticas contra una multitud que acudía a un festival de música en el hotel y casino Mandalay Bay, en Google han decidido hacer modificaciones importantes en el algoritmo de YouTube para mostrar primero las fuentes más fiables en los resultados de búsqueda.
Al parecer, ya estaban trabajando en un nuevo algoritmo. Pero lo ocurrido a raíz del tiroteo, lo cual les valió unas cuantas críticas, ha hecho que aceleren su implementación. ¿Y qué es lo que ha ocurrido concretamente? Pues algo a lo que por desgracia cualquier usuario estaba ya acostumbrado a ver: que los primeros resultados no eran precisamente los mejores.
Al hacer una búsqueda en el popular portal de vídeos con los términos «tiroteo de Las Vegas», entre los puestos más altos de los resultados aparecía un vídeo llamado «Proof Las Vegas Shooting Was a FALSE FLAG attack—Shooter on 4th Floor» («Prueba de que el tiroteo de Las Vegas fue un ataque de FALSA BANDERA — Tiroteo en el 4º piso»). En este vídeo claramente «conspiranoico», se informaba que había varios tiradores una vez que había sido confirmado por las autoridades que tan solo era uno.
El vídeo logró alcanzar más de un millón de visitas en tan solo 27 horas y, aunque YouTube lo retiró dos días después (el 4 de octubre), es de suponer que el daño ya estaba hecho. Sí, el autor no habrá conseguido lucrarse, pero su inescrupulosa actuación consiguió confundir a vete a saber cuánta gente. Y no lo hubiese logrado si no hubiera sido por el descuido con el que Google ha tratado a su plataforma.
Y es que esto no es nuevo. En YouTube abundan los vídeos falsos, que dicen ser cosas que luego no son. Eso ya de por sí es un problema que exige una solución, pero que en cierta medida no causa tanto daño como el hecho de que algo que luego se ha comprobado como falso aparezca entre los primeros resultados.
Sí, en este punto se puede debatir mucho. Pero lo que no da lugar a debate es que, al menos durante las horas (o incluso días) siguientes a un evento trágico, se de prioridad a informaciones que cuestionen la oficial ya que lo único que hacen es causar una confusión que puede degenerar en daños colaterales igual o más trágicos aún.
Parece que Google por fin ha sido consciente de la responsabilidad con que carga hoy en día. Tanto su buscador como YouTube son utilizados por mucha gente como la primera forma de conseguir información de actualidad, y eso exige por su parte que sus herramientas para ofrecer las fuentes más apropiadas estén bien afinadas.
¿Lo habrá conseguido con este cambio en el algoritmo? Pues ya veremos. La única forma de comprobarlo es, por desgracia, cuando vuelva a suceder un evento de alto impacto, que es el momento en el que se ponen a prueba estas alteraciones. De todas formas, es de suponer que también observaremos resultados diferentes en el día a día. Habrá que estar atentos a los mismos para saber si de verdad ha sido una mejora o la cosa ha ido a peor.
