El iPad que recibió Jordy Castor como regalo al cumplir 17 años fue el detonante que impulsó a otro nivel la pasión que sentía esta chica por la tecnología; una pasión que terminó por llevarla a formar parte del equipo de ingenieros de software encargado de VoiceOver, la funcionalidad de accesibilidad que Apple incorpora en sus sistemas operativos para que puedan ser usados por invidentes o personas con visibilidad deficiente.

Jordy Castor tiene en la actualidad 22 años. Es ciega de nacimiento debido a su parto prematuro: nació 15 semanas antes de lo esperado. Tenía muy pocas posibilidades de sobrevivir según los médicos, pero consiguió salir adelante. Y podría decirse que desde entonces no paró, ya que ha llegado a formar parte de una de las empresas de tecnología más importantes del mundo. En Apple, además de formar parte del equipo de VoiceOver, también ha trabajado en el desarrollo de Swift Playground, una aplicación para enseñar a programar a niños invidentes.

Sus padres, lejos de envolverla en una burbuja de protección, lo que hicieron fue animar y fomentar su curiosidad, motivarla a ser una persona de acción, a ser aventurera y a desafiar las expectativas de las personas con discapacidades. La actitud de sus progenitores con ella fue el acicate que la dirigió hacia la interacción con la tecnología y específicamente con la programación, lo cual terminó por llevarla a la conclusión de que, con sus conocimientos, podría ayudar a hacer la tecnología más accesible para los usuarios ciegos.

Siendo estudiante en la universidad del estado de Michigan, en 2015 Castor fue a una feria de trabajo en Minneapolis a sabiendas de que gente de Apple estaría allí. Estaba nerviosa y no hacía más que repetirse que nunca sabría que habría ocurrido si no lo intentaba. Se acercó a los miembros de Apple y les contó acerca del impacto que le produjo el primer iPad que tuvo.

La razón de ese impacto fue la accesibilidad. Según le declaró a Mashable «Todo funcionaba y era accesible con tan solo sacarlo de la caja. Era algo que jamás había experimentado antes».

Su pasión por la accesibilidad la llevó a ser contratada como pasante, enfocándose en el trabajo de VoiceOver. Posteriormente, cuando la pasantía estaba a punto de finalizar, en la empresa se dieron cuenta de que no podían dejar ir a una persona con sus habilidades y su nivel de compromiso en la materia, así que la contrataron a tiempo completo.

Apple: una empresa comprometida con la accesibilidad

Lo cierto es que uno de los campos en los que Apple resulta digna de elogio es precisamente en el de la accesibilidad. En lugar de que las funcionalidades especiales para invidentes se añadan a sus dispositivos de manera opcional, son incorporadas de serie y mejoradas de manera continua. Esto es una política que Apple, especialmente en los dispositivos móviles, ha mantenido desde el principio en un esfuerzo para conseguir que las características inclusivas sean un estándar y no algo especializado. Según Sara Herrlinger, senior manager de políticas e iniciativas para la accesibilidad global (global accessibility policy and initiatives) en Apple, que estas características formen parte del sistema operativo hace que también sean gratuitas: «Históricamente, para la comunidad de invidentes y deficientes visuales hay cosas adicionales que tienen que comprar o cosas que tienen que hacer para ser capaces de utilizar la tecnología».

Los esfuerzos de Apple en este sentido han sido reconocidos por la comunidad, pues este año recibió el premio Robert S. Bray otorgado por el American Council of the Blind (Consejo americano de invidentes) por los pasos dados en dirección a la accesibilidad y la dedicación continuada en la innovación dirigida a la inclusión de los usuarios invidentes.

En muchas ocasiones, el éxito de las innovaciones por las que ha recibido el premio dependen no solo de la retroalimentación ofrecida por la comunidad, sino también de empleados como Jordy Castor, que se revelan capaces de ofrecer una opinión de primera mano acerca de la experiencia con la tecnología que tienen las personas ciegas.

No hace mucho, Castor intervino en una conferencia de la Federación Nacional de Ciegos contando su historia. Cuando ingresó en el salón de actos donde iba a participar, lo que escuchó fue el impacto que Apple había tenido en la comunidad de invidentes: «Mientras caminaba a través de la convención, oía VoiceOver por todas partes.».

Pero Castor no solo quiere mejorar la relación de los invidentes con la tecnología, sino ayudarlos que sean ellos mismos quienes la mejoren. De ahí que esté involucrada activamente con la aplicación Swift Playgrounds. Esta aplicación, que hace uso de VoiceOver para ser accesible para los niños ciegos, permitirá que aprendan programación usando comandos para hacer que un personaje se mueva a través de puzzles, lo cual contribuirá sin duda a la aparición de futuros ingenieros dentro de la comunidad.

Siendo una persona tan proactiva y tan comprometida con mejorar la vida de los invidentes a través de la tecnología y haciendo cuenta de sus logros, Castor tiene un solo mensaje para la próxima generación de programadores ciegos: «La ceguera no te define. Es una parte de quien eres como persona, como una característica. Pero no te define a ti ni define lo que puedes hacer en la vida».