Hoy en día, resulta incluso difícil encontrar una televisión que no sea inteligente; es decir, televisiones que sean computadoras, al estilo de como lo son nuestros teléfonos. Es fácil comprobarlo: solamente hay que ir a cualquier tienda de electrodomésticos o a cualquier gran superficie.

Gracias a esto, el consumo de vídeo por Internet se ha incrementado considerablemente. Sin embargo, ¿qué tanto de este consumo se realiza a través de la pantalla de una televisión y no desde celulares o computadoras de escritorio o portátiles? Pues bastante, a juzgar por los datos que han recopilado en Google acerca de esta materia.

La visualización de YouTube a través de una pantalla de televisión se ha doblado desde 2016 a 2017. Según una encuesta de Google e Ipsos Connect realizada en julio de 2016, 2 de cada 3 usuarios afirman ver los vídeos de esta forma. Para contextualizar este dato, vale la pena mencionar que se considera como usuario consumidores entre 18 y 54 años que ven vídeos en la plataforma al menos una vez al mes.

Lo curioso es que el acceso a YouTube desde televisiones sigue el patrón habitual del acceso a los canales de TV convencionales: las horas pico diarias se corresponden con lo que se considera prime time, subiendo desde las 6 de la tarde hasta lo más alto alrededor de las 10 de la noche. Y de la misma forma, los picos de visitas se producen en los fines de semana, siendo el sábado el día álgido.

A la hora de ver YouTube en compañía, el 60% de los usuarios lo hacen también desde una televisión. El restante se reparte entre dispositivos móviles y computadoras (escritorio o portátiles).

Como señalan en el informe de Google, aunque el streaming online y la transmisión de contenidos a televisiones a través de dispositivos como el Chromecast y similares se ve hoy día como algo natural, no hay que olvidar que las smart TV llegaron al mercado hace tan solo 10 años. Por aquel entonces, Hulu acababa de lanzarse, Netflix estaba tan solo haciendo sus primeros experimentos con el streaming, YouTube era algo que la gente experimentaba invariablemente desde una computadora.

Desde entonces hasta hoy, las cosas han cambiado mucho. El vídeo online ha saltado prácticamente a todas las pantallas disponibles, yendo desde nuestro despacho o estudio (lugar habitual para la computadora), hasta nuestras salas y dormitorios, primero desde el celular y ahora desde la televisión gracias a la adopción de las smart TV.

Como se puede ver en los datos, todavía no es algo que se haya generalizado del todo. Pero es cuestión de tiempo. Al fin y al cabo, apenas hace 10 años que se se inició esta tendencia y a día de hoy, el mundo del streaming sigue evolucionando y nos queda mucho por ver. En más de un sentido.