Sí, se habla mucho de la tecnología blockchain últimamente. Y esto es así debido al éxito de las criptomonedas. Sin embargo, no todo son parabienes y algunas grandes compañías han decidido prohibir los anuncios no solo de Bitcoin, sino en general de cualquier tipo de moneda cifrada y servicios relacionados.
De las grandes, quien comenzó con todo esto fue Facebook, a principios de este año, cuando actualizó su política de publicidad. A más de uno le sorprendió esta decisión cuando, no mucho antes, el mismo Mark Zuckerberg había hablado bien de las criptomonedas y expresado abiertamente su interés en las mismas.
Mes y pico después, quien tomó la misma decisión fue Google, y también de la mano de un cambio más amplio en la política de publicidad. A partir de junio de este año, se limitarán mucho más los anuncios relacionados con productos financieros, como los no regulados o especulativos de alto riesgo. Y en este saco entran las criptomonedas: estarán prohibidos los anuncios que las promocionen o que promociones ofertas iniciales de monedas (las denominadas ICO).
No mucho después, vino Twitter a hacer lo mismo, pero con más celeridad que Google. La empresa del pajarito no dejó margen de tiempo a la hora de implementar la nueva política, sino que la aplicó al día siguiente de que la anunció: desde el 27 de marzo, nada de anuncios relacionados con ICOs, venta de tokens, billeteras digitales e incluso casas de intercambio, aunque respecto a estas últimas parece que habrá algunas excepciones. La prisa de Twitter se debió posiblemente a la presión para ir más lejos a la hora de proteger a los usuarios del fraude, toda vez que empezó a tomar medidas para que cuentas relacionadas con criptomonedas interactuasen de forma engañosa con otros usuarios.
A pesar de todo, estas grandes empresas no han sido las primeras en prohibir la publicidad de las criptodivisas. Alguien se les adelantó en nada menos que casi 2 años: Reddit, que implementó una prohibición general de esquemas de productos financieros incompletos en 2016. En esta prohibición se incluían las criptomonedas, a pesar de que no lo mencionasen específicamente, como sí han hecho las 3 nombradas antes.
¿Por qué la prohibición?
¿Están todas estas empresas en contra de las criptomonedas, una de las tendencias tecnológicas y financieras más potentes de los últimos años? No exactamente. Al menos, Facebook (o su responsable) no lo está. Sin embargo, es precisamente un extracto del comunicado de la red social donde su puede ver cuál es la razón detrás de esta prohibición.
Y es que desde Facebook afirman que estos productos financieros «con frecuencia se asocian con prácticas promocionales engañosas o fraudulentas». Es decir, que a pesar de que las criptomonedas en sí mismas no tienen por qué considerarse como un producto fraudulento, al parecer la mayoría de los anunciantes si buscan estafar de alguna manera a los usuarios.
Por otra parte, y aunque el resto de compañías no han dicho nada similar, desde la red social afirman que esta política podría revertirse en el caso de que las cosas cambiasen. Al fin y al cabo, cuando una tecnología se populariza, es más fácil que aparezca más gente inescrupulosa intentando aprovecharse de los novatos.
Creo que en este aspecto, si estas empresas han tomado dicha decisión es porque han observado una tendencia preocupante. Al fin y al cabo, no van a renunciar a una fuente de ingresos así como así: cuando toman medidas de este tipo, lo hacen porque se trata de un tema delicado que realmente puede ocasionar efectos desastrosos.
Aunque normalmente no es un tema que se mencione mucho en los medios tecnológicos, las estafas con criptomonedas están ahí. De hecho, no olvidemos que no hace mucho se reportó en Ecuador un caso que afectó a unas 1.500 personas en 9 ciudades del país. Por lo tanto, nada mejor que no dejarnos llevar por el entusiasmo del blochain monetario y, si estamos interesados en internarnos en este mundo, informarnos mucho antes de sacar la plata del bolsillo.
Por el momento, Reddit, Google, Facebook y Twitter nos ayudan a que no caigamos con facilidad en las trampas que nos tiendan, pero recordemos que hay muchas maneras de poner esas trampas en nuestro camino y no tienen por qué ser solo a través de Internet, sino también de forma presencial.
