Cuando Amazon anunció que iba a tener una cadena de tiendas físicas, muchos lo consideraron como un retroceso o una derrota del «hacer todo online». Sin embargo, nada más lejos de la realidad, pues tan solo se trataba de una estrategia para ampliar su presencia en el mercado y fijar aún más su marca ya que, aunque nosotros no lo creamos, todavía hay mucha gente que vive al margen de lo que ocurre en Internet.

Ahora, con las tiendas funcionando, Jeff Bezos quiere darle una vuelta al concepto de la tienda física y, tecnología mediante, implementar el primer local en el que tan solo entraremos, cogeremos lo que necesitamos y saldremos: nada de cajas, nada de dependientes y, por supuesto, nada de filas. Pero sí habrá un requisito: llevar el celular encima.

Estas tiendas tendrán el nombre de Amazon Go y funcionarán por medio de una aplicación con el mismo nombre que agregará automáticamente los productos a un carrito de compras digital. La idea es que la tecnología de aprendizaje automático de Amazon podrá identificar cuando coges un producto y así, cuando abandones la tienda con él, Amazon te cargará el gasto a tu cuenta en el servicio.

El proceso será más o menos así: al entrar, pasas tu teléfono con un código QR en la pantalla por un escáner. A partir de este momento, la tecnología de Amazon se encargará de identificar qué cosas te llevas y cuáles no mediante una combinación de visión artificial, sensores y aprendizaje profundo. Según dicen en el siguiente vídeo, el sistema empleado es capaz de distinguir, por ejemplo, si cogemos un producto, luego lo devolvemos al estante y al final, al decidirnos, nos lo llevamos definitivamente. Cuando salgamos, todo lo que llevemos con nosotros será cargado a nuestra cuenta de Amazon. A partir de ese mismo momento, podremos revisar en la aplicación si esos cargos son o no correctos.

Las Amazon Go serán principalmente supermercados, pues lo que ofrecerán será comida precocinada, alimentos básicos como pan y leche, y otros comestibles. Según han informado desde Amazon, tendrán una extensión de 1.800 pies cuadrados, lo que las hace relativamente pequeñas en comparación con las grandes superficies de venta de alimentos que existen en Estados Unidos.

Los planes internos de Amazon son abrir 2.000 supermercados por Estados Unidos durante la próxima década. Habrá que ver cuántos de estos terminan siendo tiendas Amazon Go. Por de pronto, la primera se abrirá al público en Seatle, a principios del año que viene.

Un sistema nuevo en una propuesta vieja

Lo de entrar y salir de una tienda evitando el proceso convencional de pago no es algo nuevo. Ya se propuso hace tiempo por medio de la tecnología RFID. Sin embargo, no parece que la propuesta de Amazon haga uso de ella; o si lo hace, no lo han dicho.

Habrá que esperar a ver cuáles son los resultados que obtienen una vez que la tienda esté en marcha. Creo que se puede asumir que deben haber estado haciendo numerosas pruebas con su sistema antes de lanzarse con una iniciativa pública, o al menos las suficientes como para asumir que está lo bastante afinado como para hacer una experiencia en terreno real. Sin duda, habrá casos curiosos y errores de identificación, pero ese tipo de cosas solamente les servirá a Amazon para ir refinando el sistema.

Un debate que ha suscitado esta noticia de Amazon es el hecho de si este es un paso importante de cara a la sustitución de humanos por máquinas en sectores laborales de baja cualificación. No es nuestra intención entrar en este tema ahora, el cual resulta muy interesante, pero al respecto es recomendable revisar este artículo publicado en Xataka donde apuntan a que reducir la fricción en la experiencia de compra, la cual se incrementa cuando tenemos que proceder al pago, no es tanto un asunto de optimización de recursos como de marketing: se busca facilitarle la vida al cliente para que compre sin darse cuenta de que lo hace. Y como no se da cuenta, es más fácil que compre más.