Uno de los puntos fuertes del flamante iPhone 7 (en sus sabores normal y Plus) es su resistencia completa al agua. Exactamente, el teléfono tiene un grado de protección IP67 certificado. Este grado significa dos cosas en base a los dos números: el primero señala su resistencia al polvo (a los objetos sólidos en general) y el segundo su resistencia al agua. El 6 es el nivel más alto, que indica que el polvo no entra bajo ninguna circunstancia. En cuanto al agua, el 7 indica que soporta «sin filtración alguna la inmersión completa a 1 metro durante 30 minutos».

El competidor más directo del iPhone es, casi por convención popular y porque así lo busca (y lo proclama) la propia compañía, el Samsung Galaxy de gama alta. Y yendo al terreno de la durabilidad, el Galaxy S7 tiene un grado de protección IP68, de manera que en lo referente al polvo es igual al iPhone 7, pero en la resistencia al agua, lo supera: soporta sin filtración alguna «la inmersión completa y continua a la profundidad y durante el tiempo que especifique el fabricante del producto con el acuerdo del cliente, pero siempre que resulten condiciones más severas que las especificadas para el valor 7».

Entonces, ¿hay una diferencia significativa entre la resistencia al agua del iPhone 7 y la del Samsung Galaxy S7? Y dejando esto aparte, ya que hablamos de resistencia, podríamos preguntarnos: ¿qué tanto castigo puede aguantar un iPhone 7? Pues bien, los autores de los vídeos que te presentamos más abajo trataron de responder estas preguntas. Así que sigue leyendo para averiguar qué respuestas obtuvieron.

Galaxy S7 vs. iPhone 7 en el agua

En el primer vídeo, se ponen a prueba ambos teléfonos sumergiéndolos a diferentes profundidades y comprobando después su funcionamiento. Primero, durante 5 minutos se les sumerge 5 pies, que viene a ser un metro y medio, algo superior al grado IP67. Los dos teléfonos parecen resistir sin problemas y su funcionamiento no se ve afectado. A partir de ahí, se siguen sumergiendo a intervalos de 5 pies adicionales (siempre durante 5 minutos) y ambos celulares sobreviven intactos hasta que llegan a los 30 pies (algo más de 9 metros).

A partir de los 30 pies, el Galaxy S7 se reinicia por alguna razón misteriosa, pero consigue recobrar su funcionalidad. En cuando al iPhone 7, parece que su nuevo botón capacitivo se ha visto afectado de alguna forma. Entonces llega la prueba final: inmersión a, más o menos, 35 pies (más de 10 metros y medio).

Y aquí es donde el Galaxy S7 fenece: no se muestra nada en la pantalla y no reacciona de ninguna forma. En cuanto al iPhone 7, se conserva en forma. No parece haber ningún daño más allá de un ligero desperfecto en la parte inferior de la pantalla, pero el teléfono reacciona y parece que puede usarse. A pesar de que, como dice el autor del vídeo, habría que ver durante cuánto tiempo continúa funcionando, lo cierto es que este iPhone supera las expectativas que se han puesto sobre él en lo referente a la resistencia al agua.

Si deseas ver todo el experimento, aquí tienes el vídeo:

iPhone 7 en caída libre

En el siguiente vídeo, el iPhone 7 no compite contra nadie salvo consigo mismo. Bueno, y también contra el autor del vídeo, que lo lanza desde un helicóptero para comprobar que tan resistente es.

Este vídeo no es tan detallado como el anterior: el autor solo compra el iPhone, se sube a un helicóptero y lo lanza hacia afuera. El resultado es tan impresionante como el del vídeo anterior: el iPhone 7 ha sufrido daños evidentes, pero continúa funcionando. De hecho, se ha grabado toda la caída por el aire del dispositivo.

Esta prueba recuerda al caso de la usuaria a la que se le cayó un iPhone 5S desde una avioneta del que ya hablamos en otra ocasión. En este caso, parece que el teléfono también ha caído en una zona con árboles y hierba, lo que debe de haber amortiguado un tanto el golpe.

Aquí está el vídeo completo para que puedas comprobar qué tanto se daño el iPhone al caer:

Como es lógico, estas pruebas hay que tomarlas con pinzas porque no son muy rigurosas que digamos. Además, la experiencia que tengamos nosotros con el dispositivo puede ser diferente. Pero dado que son pruebas realizadas en entornos reales (aunque no creo que mucha gente se sumerja a tanta profundidad y durante tanto tiempo con su teléfono) tienen su valor y sobre todo demuestran la alta calidad del último teléfono de Apple, que a pesar de no haber venido cargado de grandes novedades o innovaciones, sigue siendo uno de los mejores celulares de gama alta que hay en el mercado. Y sin duda, muy resistente.