Una vez más, la plataforma de computación cognitiva de IBM, Watson, vuelve a pasarse por aquí. Y es que esta inteligencia artificial forma ahora parte también los nuevos servicios que la empresa está ofreciendo a sus clientes como parte de la renovación de su división de Servicios Tecnológicos Globales.

Y lo que ofrecen desde IBM no es menor: se trata de minimizar interrupciones de servicio como caídas de los servidores o fallos de conexión gracias a la predicción de los mismos antes de que ocurran, lo que permitirá tomar medidas correctivas automáticamente. Así, se podrá buscar apoyo de capacidad adicional en la nube o redireccionar el tráfico de la red para rodear los cuellos de botella. Así lo explicó Bart van den Daele, que forma parte de IBM Global Technology Services en Europa.

Según Daele, este sistema permitirá que, por ejemplo, en lugar de tener a un analista para que esté mirando un tablero de control tratando de interpretar los datos de rendimiento de la red, esa persona podría ahora ser alertado automáticamente de una desaceleración y se le presentarían tres opciones entre las que elegir para que la red funcione de nuevo con fluidez. Dado que el sistema también tiene la capacidad de entender las consultas empleando lenguaje natural, podría también asumir gran parte del trabajo de bajo nivel que el personal de soporte de una empresa tiene que manejar a diario.

Para conseguir algo como esto, en IBM han estado alimentando a Watson con datos de más de 10 millones de incidentes, lo cual permite que, actualmente, el sistema ahora maneje más de 800 mil incidentes al mes. La analítica basada en inteligencia artificial se ejecuta en la plataforma de computación en la nube de IBM, pero los datos subyacentes son retenidos por el cliente en cualquier arquitectura de red que utilicen en el momento.

El nuevo sistema ya ha sido probado por algunos clientes. Por ejemplo, desde el grupo bancario danés Danske Bank A / S afirmaron que gracias a él ya han experimentado mejoras en el rendimiento de la red, con una reducción significativa de incidentes de servidor.

Más específico fue Van den Daele, que dijo que un gran distribuidor de servicios de alimentos, que no podía nombrar por confidencialidad, fue capaz de reducir en un 89% los problemas críticos de una red de 4 mil servidores. También redujo el tiempo necesario para resolver los problemas de 19 horas que empleaban antes de tiempo promedio, a sólo 28 minutos.

 

Moviendo un gigantesco barco a las aguas de la inteligencia artificial

Esta nueva oferta forma parte del pivotaje que está realizando IBM para dejar de depender de productos más antiguos como computadoras y software. La intención es desplazarse a áreas que experimentan un mayor crecimiento, como esta de la inteligencia artificial y la nube.

Este sistema le permitirá a la compañía mantener su cuota de mercado en la gestión de infraestructura de redes, pero tiene al frente una dura competencia en figuras como Microsoft, Cisco Systems y Alphabet. Por ejemplo, desde Google están haciendo grandes esfuerzos por mejorar en lo que se refiere a inteligencia artificial y a la automatización para ayudar a sus clientes a administrar sus servidores y redes. Y en Microsoft han hecho una reorganización a nivel de ventas para centrarse en la venta de productos y servicios compatibles con la IA.

Watson es uno de los productos más exitosos de IBM y quizá es por eso que Ginni Rometty, desde que se convirtió en director ejecutivo en 2012, ha buscado integrarlo cada vez más en todas las ofertas de productos. Otra de las razones para pivotar en esa dirección fue porque las ventas tradicionales, entre las que se cuentan hardware y contratos para su mantenimiento, no han dejado de disminuir. De hecho, en el primer trimestre de este año, IBM ha encadenado su  trimestre número 20 de descenso consecutivo de ingresos.

Sin duda, mover un gigante como es esta compañía es complicado y lleva tiempo. Pero a juzgar por el trabajo que están haciendo en inteligencia artificial, hay que reconocerle a IBM y a Rometty que parecen ir por el buen camino. Es de suponer que, en algún momento, todo lo que hacen se verá reflejado en una remontada. Y esperamos estar aquí para verlo.