Es sabido por todos que Facebook nos muestra anuncios dentro de su servicio tomando como base nuestra actividad, nuestros gustos y, en general, toda la información que recopila acerca de nosotros. Sin embargo, tal vez es menos conocido que, de un tiempo a esta parte, está usando esa información para mostrarnos publicidad no solamente dentro de la red social, sino también fuera de ella, a lo largo y ancho de toda Internet, tanto en sitios webs como en aplicaciones.

Este tipo de publicidad personalizada tiene dos lados. El positivo es que, supuestamente, los anuncios que se nos mostrarán serán relevantes para nosotros, lo cual siempre será mejor que ver anuncios de cosas que no nos interesan lo más mínimo. El negativo: que la experiencia puede ser a veces muy desasosegante e incómoda; «creepy», que dirían los gringos. Los anuncios están en ocasiones pautados con tanta brusquedad que la sensación de que alguien nos sigue la pista resulta tan patente que llega hasta a asustar.

Si bien es cierto que no podemos impedir que Facebook recopile toda la información que quiera sobre nosotros, también es verdad que podemos limitar al menos un poco el radio de acción de sus anuncios y su capacidad de personalización. Con esto conseguiremos recuperar un pedacito muy pequeño de nuestra privacidad, al mismo tiempo que le mandamos una señal a Facebook de que estas prácticas no nos gustan. Y aunque sea muy poco lo que conseguimos, a continuación vamos a ver como hacerlo.

No lo olvidemos: hagamos lo que hagamos, el rastreo se producirá igualmente y seguirán recopilando información acerca de los sitios que visitamos. Evitarlo es muy difícil y acarrea bastante incomodidad en relación a la experiencia de uso de la Web a la que estamos acostumbrados.

Cómo impedir que los anuncios que veamos sean personalizados por Facebook

Para conseguir esto, debemos seguir varios pasos y desactivar varias opciones. A continuación, veremos la forma más total y absoluta de desactivación. Sin embargo, considera que tú siempre puedes elegir la configuración de cada una de acuerdo a la importancia que le des a este tema e incluso a tus necesidades.

1.- Vamos a nuestra configuración de cuenta. Para ello, nos desplazamos a la parte superior derecha y desplegamos el menú que aparece al clicar la flecha que apunta hacia abajo. En ese menú, clicamos en «Configuración».

fb-principal

2.- Dentro de nuestra cuenta, nos fijamos en las opciones de la barra lateral izquierda. Allí, hacemos clic en «Anuncios publicitarios».

3.- En la sección «Anuncios de Facebook» que aparece a la derecha, se nos muestran cuatro apartados. El objetivo aquí es seleccionar las opciones más restrictivas para cada una de ellas: «No», «Nadie» o «Desactivado», dependiendo de lo que se nos de a elegir. Veamos cada uno de ellos por separado.

– «Anuncios basados en mi uso de sitios web y aplicaciones»: este apartado se refiere a mostrarte publicidad fuera de Facebook basada en tu actividad en otros sitios. Concretamente, basada en «el uso que haces de los sitios web y las aplicaciones que utilizan tecnologías de Facebook». Piensa que esto de «Tecnologías de Facebook» se refiere a algo tan simple como un botón «Me gusta». Y hoy en día, hay botones «Me gusta» en prácticamente cualquier sitio. Por lo tanto, aquí seleccionamos «Desactivado».

fb-anuncios-basados-actividad

 

– «Anuncios en aplicaciones y sitios web fuera de las empresas de Facebook»: este apartado hace referencia a mostrarte publicidad fuera de Facebook pero que, al estar gestionada por la red social, esta se basa en tus preferencias de anuncios dentro de ella, las cuales suelen estar basadas en tu actividad dentro del servicio. La opción aquí, como dijimos antes, es «No».

fb-anuncios-fuera-fb

– «Anuncios con mis acciones sociales»: la imagen que se muestra como ejemplo en este apartado resulta bastante elocuente. Si le das «Me gusta» a una página y luego esta hace publicidad dentro de Facebook, a tus amigos les aparecerá en el anuncio que a ti te gusta esa página. Aquí es importante tener en cuenta que esta indicación solo les aparecerá a tus amigos y a nadie más. De ahí que solo haya dos opciones «Solo mis amigos» y «Nadie». Siguiendo la tónica que estamos manteniendo aquí, la opción a elegir sería «Nadie».

fb-acciones-sociales

– «Anuncios basados en mis preferencias»: este apartado es el único que no podemos configurar desde aquí, sino que tenemos que ir a las preferencias de anuncios desde el botón que hay en la parte inferior. Por lo tanto, clicamos en él para ir a esa sección.

fb-preferencias-anuncios

Los intereses de anuncios

En base a nuestro comportamiento dentro de la red social, Facebook va construyendo un perfil acerca de nosotros. Esa información se utiliza para mostrarnos publicidad de acuerdo a lo que ellos consideran que son nuestros intereses.

La sección «Intereses de anuncios» está dividida en dos grandes apartados: «Intereses» y «Anunciantes». Este último tiene dos subsecciones que son autoexplicativas y no nos vamos a detener en ellas. Solamente decir que podemos pasar por encima de cualquiera de los anunciantes y hacer clic en la «X» que aparece para que no nos vuelva a aparecer su publicidad.

En cuanto al apartado de «Intereses», tiene varias subsecciones con todos nuestros supuestos intereses divididos en temáticas. Aquí lo que debemos hacer es eliminar uno a uno todos los intereses que aparecen dentro de todas las temáticas. Lo hacemos de la misma manera que en el apartado anterior: clic en la «X» que aparece sobre cada uno al pasar por encima con el ratón.

fb-intereses-anuncios

Sin duda, esta es la parte más larga de todo el proceso, pues nuestro «historial de intereses» se habrá construido a lo largo de todo el tiempo que hemos estado usando Facebook. Y no solo eso, sino que los cambios que hagamos aquí no serán permanentes: deberemos regresar a esta sección periódicamente para eliminar los intereses que se hayan ido agregando en base a nuestra actividad (comentar, compartir, dar «Me gusta»).

Conclusión

Lo he dicho antes y ahora vuelvo a hacerlo: esto que acabamos de ver no impedirá que Facebook recopile información acerca de nosotros. Tampoco evitará que veamos publicidad: los anuncios se mostrarán queramos o no (a menos que utilicemos herramientas de terceros en las que no vamos a entrar ahora). Lo que se evita es que se muestre publicidad basada en esa información que han recopilado.

El efecto secundario es que los anuncios que veamos no van a estar relacionados con nuestros intereses o lo que Facebook piensa que son nuestros intereses, que a veces no acierta. Eso quiere decir que la experiencia va a ser un poco más incómoda porque, al fin y al cabo, como también dije antes, ya que vamos a recibir publicidad de todas formas, mejor que la recibamos de algo que sí nos pueda interesar en verdad.

Tal vez el mayor beneficio de esta configuración tan restrictiva es que reduciremos el efecto «creepy» que se produce al ver publicidad de sitios que hemos visitado poco antes (lo que se conoce como «retargeting») y así paliaremos la sensación de que nos están persiguiendo en cada sitio web que visitamos. Pero es solo eso, un paliativo: porque perseguirnos, nos persiguen.